Petr Ginz dibujó el paisaje de la luna cuando tenía 14 años, dos años antes de ser exterminado en el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau.Sesenta años más tarde, su dibujo fue inmortalizado en una estampilla postal de la República Checa, para conmemorar las muertes de los judíos durante el holocausto.
El dibujo de este chico es una representación de cómo se vería la Tierra desde la Luna. Los trazos en lápiz muestran montañas en el satélite natural, con nuestro planeta brillando al fondo.
Y es que Ginz estaba obsesionado con la ciencia y los viajes espaciales.
La triste historia de este dibujo no termina con la muerte de Ginz.
Hace dos años, el primer astronauta israelí, Ilan Ramon, se llevó el dibujo a bordo del transbordador espacial Columbia, que se desintegró pocos minutos antes de su aterrizaje.
Ramon, cuya madre sobrevivió a Auschwitz, murió en el Columbia junto con los otros tripulantes de la nave.
Es por esto que la estampilla también es un tributo al niño que soñó con viajar a través del espacio y al astronauta cuyo sueño terminó en tragedia.