El soldado de Israel Hay
un padre que se levanta para llevar a los chicos al colegio y solo
después se viste el uniforme y sale a su batallón de reserva.
Hay
un joven de 19 años del comando de infantería que terminó en primer
lugar la caminata de la gloriosa gorra que lo hace miembro del comando,
pero no sabe aun como decir "te amo" a la chica de que secretamente
ama.
Hay
un oficial que todos soportan su rigurosidad, pero por las noches
escribe poesías a su compañera, a la luz tenue de una linterna en el
campo de batalla.
El
soldado israelí tiene cosas que lo atormentan, cosas que quizás no
atormentan a ningún otro soldado en el resto de los ejércitos del
mundo.
Solo
el sabe que cada vez que sale a luchar, en mas de setenta países o mas
alguno piensa que es un asqueroso represor o asesino.
Cinco
veces por día su madre aparece en la pantalla del celular con alguna
recomendación y su padre por detrás la reta a la mama diciendo que
antes las cosas fueron mas difíciles y que deje de molestar al nene”.
Él
esta en el único ejército del mundo en el que algunos soldados
religiosos se levantan temprano en la madrugada para rezar "slijot"
(perdón).
Ni
siquiera importa en que unidad presta sus servicios, porque siempre va
a haber un compañero hijo de inmigrantes yemenita que lo hace reír, o
un pueblerino que toca en la guitarra canciones de algún cantante de
turno, o un descendiente de inmigrantes Marroquíes que trajo de su casa
luego del fin de semana provisiones de comida típica étnica para todo
su grupo.
Siempre va a haber una instructora de deportes que los deje con la lengua afuera en todos lo sentidos...
También
están esos que dicen dejar de fumar pero se la pasan pidiendo
cigarrillos a todos quien puedan. Y esta el soldado Sasha inmigrante
Ruso con su musculosa, que después de 5 minutos al sol se ve como el
cordón de la vereda en donde esta prohibido estacionar pintado de
blanco y rojo.
Solo en este ejército vas a recibir una tarta del batallón en el día de tu cumpleaños.
Solo
el soldado israelí pregunta siempre como va la guerra en el frente y
siempre va a haber quien le recuerde la verdad punzante, que no tenemos
otro lugar y que no hay a donde ir.
Ya
sesenta años que se debate en la disyuntiva del bien y el mal, que es
peor: errar a esos que lo buscan matar o destruir o si, D's libre y
guarde, dispararle a alguien por error.
No existe el "soldado israelí".
Existe
el ser humano que se alistó porque sabe que necesita hacerlo. Todos
navegamos en el mismo barco en el tenemos que seguir navegando.
El
tenía otras tantas cosas que podría hacer en vez de estar parado bajo
el calcinante sol de verano esperando al autobús para que lo lleve a su
base.
Se
lleva el libro;"Cien años de soledad" a la torre de guardia en la
frontera, en un ojo busca terroristas y en el otro roba una línea del
libro y suspira.
El no
busca ser un héroe, él prefiere salir el fin de semana a su casa y
pasarla bien con sus amigos y amigas bailando en la disco”. Sus semanas
pasan rápido pero sus días muy lentos.
enviado por Talia, escrito en argentino
Es una
obviedad decir que los soldados israelíes son seres humanos. Pero es
una obviedad que cada día necesita ser repetida, porque la vida de un
soldado es la vida más denostada por el resto de los seres humanos,
dado que se considera que no sólo deben morir, si no que se lo merecen
por haber “elegido” esa profesión. Esos mismos seres humanos que son
capaces de decir que los terroristas matan porque no tienen otra opción.